Transparencia de la nube: vital para las empresas

La Nube | Grupo Arión

Las empresas quieren algo específico de la nube, y eso es transparencia

Entre más se democratiza y se entiende el uso de la nube, más empresas se empiezan a sentir cómodas con ella y con la seguridad que les otorgan sobre su información sensible y todo lo demás que guardan. Sin embargo, aún existe un problema crucial en ese acuerdo: las empresas quieren transparencia de parte de la nube, sobre todo, saber exactamente cómo los proveedores usan su data, de hacerlo, y todo lo demás que se acumula en las cuentas.

Algunos proveedores como Microsoft y Google ya han hecho algunos avances para aumentar la visibilidad de los procesos que utilizan en relación al tratamiento de los usuarios. Sin embargo, las empresas demandan que la mayoría de los proveedores no están haciendo suficiente y están exigiendo más informes respecto a asuntos como la telemetría y los metadatos que se recopilan en los procesos internos, además de que quieren más herramientas para rastrear las interacciones directas con las cargas de trabajo de los usuarios, es decir, más controles de acceso.

Muchos servicios en la nube recopilan datos de telemetría para mejorar el rendimiento de las aplicaciones. Esto ha generado cierta preocupación, sobre todo en el sector gubernamental, quienes necesitan más compromiso en torno a la información personal o comercial que se guarda en ellas. En algunos lugares esta preocupación ha ido tan lejos que incluso se prohíbe el uso de Microsoft Office, como en el sonado caso de las escuelas del estado alemán de Hesse, debido al uso del sistema de telemetría que usa Windows 10.

Hay otro problema que preocupa a las empresas: estos mismos proveedores pueden rastrear el uso anónimo y los metadatos de sus clientes para detectar brechas en su servicio e identificar otros intereses de los usuarios que luego podrían resultar productivos, ¿y quién tiene acceso a eso?, ¿qué se puede lograr con esa información?, ¿qué significa eso para la competencia? la idea de que los proveedores puedan tener libertad de vender esa data suelta resulta alarmante para las empresas.

En ese sentido, la nube y sus proveedores aún tienen mucho en qué trabajar para mantener a las empresas satisfechas. Ahora saben que el problema está en la transparencia, así que es buen momento para empezar a trabajar en regulaciones.

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