La Ola que Viene de Mustafa Suleiman es una reflexión del futuro de la humanidad
Recientemente, Mustafa Suleiman, cofundador de Mente Profunda e Inflexión AI, publicó su libro “The coming wave” que en español se ha traducido como “La Ola que Viene: Tecnología, poder y el gran dilema del siglo XXI” Un texto que proporciona sugerencias para que esta ola tecnológica sea para bien y no genere disrupción, inestabilidad e incluso una catástrofe para la humanidad.
Para presentar su libro, Mustafá ha liberado un video de 12 minutos que presenta el alcance de los conceptos que abarca La Ola que Viene. El video en sí mismo despierta una inquietud sobre el momento que estamos viviendo. Si bien habrá que leer el libro, aquí les presentamos el video y abajo la transcripción en español de lo que relata el propio video:
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A continuación la transcripción de la narración del video de La Ola que Viene:
Empezamos a ver cómo se impacta en nuestro alrededor una nueva ola de tecnología centrada en la IA y la biología sintética. Esta ola está desatando el poder de dos fundamentos universales: nada menos que la inteligencia y la vida misma.
Soy Mustafa Suleiman, cofundador de Mente Profunda e Inflexión AI. Como emprendedor de IA, he dedicado mi vida a la construcción de nueva tecnología. He estado en el corazón de la revolución de IA desde que se sintió como una discusión de franja para un pequeño grupo de investigadores, casi una década y media atrás. Ahora, con mi libro “La ola que viene“, quiero contar la historia de la tecnología en el siglo XXI y comenzar a sugerir cómo tal vez pueda asegurarse de que este sea uno que termina bien.
La Ola que Viene, el comienzo de un nuevo amanecer para la humanidad
Estas son algunas de las ideas cruciales: no es exagerado decir que la próxima ola marcará el comienzo de un nuevo amanecer para la humanidad, creando riqueza y excedentes diferente a todo lo que hemos visto. Estas tecnologías ofrecerán nuevos avances médicos extraordinarios y avances en energía limpia. Crearán no sólo nuevos negocios, sino nuevas industrias y mejoras en calidad de vida en casi todos los aspectos imaginables. Sin embargo, su rápida proliferación también amenaza con empoderar a una amplia gama de malos actores para producir disrupción, inestabilidad e incluso catástrofe.
Esta ola crea un inmenso dilema que definirá el siglo que tenemos por delante. Nuestro futuro depende de estas tecnologías y, sin embargo, también está en peligro por ellas.
El desafío no es desencadenar sino contener
Para la mayoría de las tecnologías históricas, el desafío residía en crear y desencadenar su poder. Con esta nueva ola, el desafío se ha volteado: ahora es contener el poder desatado de las tecnologías, garantizar que continúe sirviéndonos y a nuestro planeta. Yo llamo a esto el “problema de contención”: la difícil tarea de contener una nueva ola expansiva de acontecimientos no intencionados y las consecuencias tecnológicas que conlleva.
La contención es la capacidad para monitorear, controlar y limitar la tecnología en cualquier etapa de su desarrollo o despliegue. En algunas circunstancias, la contención puede incluso significar detener una tecnología antes de que comience a proliferar. La historia nos muestra que esto está lejos de ser normal: desde las primeras fogatas a las chispas del motor de combustión interna, desde las primeras letras garabateadas hasta el texto interminable de la tecnología de internet, la tecnología tiene una trayectoria inevitable de difusión masiva en grandes olas turbulentas. Este patrón se mantiene desde las primeras herramientas de pedernal y hueso hasta los últimos modelos de IA.
La gente quiere más, mejor, más fácil, más barato. Experimenta, incrementa los costos, mejora capacidades, repite, crece y se adapta. Por más que intentemos resistirlo, esta es la naturaleza evolutiva ineludible de la tecnología: siempre se extiende por todas partes.
Mustafa Suleiman afirma que la IA está ganando poder
Esto es lo que podemos esperar en la futura ola: hoy, la IA está ganando poder. Los modelos de lenguaje grandes producen texto con una coherencia que hace apenas unos años hubiera parecido increíble. La IA puede escribir código, generar impresionantes imágenes, componer música, gestionar nuestro tráfico, ejecutar nuestros almacenes y diagnosticar raras condiciones. En tan solo unos años, los modelos de IA han pasado de tener cientos de millones a billones de parámetros, incluso cuando se han vuelto más pequeños y más eficientes. Los modelos de lenguaje grandes son la tecnología de consumo que se difunde más rápidamente que jamás hayamos visto.
La IA se está moviendo más rápido de lo que incluso los expertos de la industria pueden rastrear o predecir. Ahora, este cambio exponencial se está expandiendo a la robótica, biotecnología, computación cuántica e incluso nuevas fuentes de energía. El costo de secuenciar el ADN, por ejemplo, se ha desplomado, y ahora tenemos una capacidad cada vez mayor para sintetizarlo, para escribir el código de la vida y crear nuevas formas de vida orgánica.
El mayor incentivo: el poder, el dominio y la economía
Esta ola está impulsada por profundos incentivos. Liderado por Estados Unidos y China, una carrera geopolítica por el dominio ya está en marcha. La IA y la biología sintética también crearán un boom económico masivo. Los premios de intentar controlarlos para aquellos que los crean y los empuñan son parte de un sistema distribuido de investigación que impulsa su desarrollo y ayudará a abordar los desafiantes retos globales. Esta es la razón por la que la ola que se avecina realmente es próxima, pero esta ola también es diferente a las del pasado.
La Ola que Viene habla de 4 características que dificultan la contención
Estas herramientas están marcadas por cuatro características clave que hacen su contención especialmente difícil.
Primero, evolucionan a una velocidad vertiginosa.
Segundo, permiten impactos enormemente asimétricos.
Tercero, son inherentemente generales, trabajando en todos los ámbitos de la sociedad.
Cuarto, están empezando a mostrar signos de autonomía.
Cada uno exacerba el desafío de controlarlos. Colectivamente, estas tecnologías ofrecen un cambio radical en el potencial humano. Si el internet le dio a todos la capacidad de transmitir información, la nueva ola da a las personas la capacidad de hacer cosas en una escala sin precedentes. Como resultado, estas tecnologías ofrecen nada menos que una proliferación radical de poder. No estamos preparados.
En manos de los malos actores pueden ser perturbadoras
No es ningún secreto que estas tecnologías dan a los malos actores un nuevo conjunto de herramientas, estimulan un aumento de la desinformación y desplazan puestos de trabajo. Aunque ofrecen inmensos beneficios, también amplificarán la fragilidad social y podrían incluso presentar una amenaza existencial al Estado-nación, introduciendo riesgos tan profundos que podrían perturbar o revertir el orden político actual. Al mismo tiempo, abren caminos hacia ciberataques automatizados potenciados por IA, guerras que podrían devastar países, pandemias diseñadas y un mundo a merced de fuerzas inexplicables y, sin embargo, aparentemente omnipotentes. La probabilidad de que ocurra cada uno puede ser pequeña, pero las posibilidades de que ocurra al menos uno de ellos durante el siglo que tenemos por delante son bastante altas.
Para que esta nueva era sea segura y justa, tenemos que estar a la altura del desafío. Es vital que desarrollemos un nuevo conjunto de herramientas, políticas y mecanismos de gobernanza que nos permitan monitorear, entender y controlar estas tecnologías antes de que nos superen. Ahora es el momento de comenzar.
La Ola que Viene es también de esperanza
Sin embargo, todavía hay esperanza. Estas tecnologías también tienen el potencial de solucionar algunos de los problemas más acuciantes de nuestro tiempo, desde la crisis climática hasta las enfermedades incurables. Debemos equilibrar cuidadosamente el riesgo y el beneficio, y trabajar juntos como sociedad global para garantizar que esta ola de tecnología sea moldeada de manera que beneficie a todos, en lugar de sólo a unos pocos selectos.
La ola que viene no es simplemente una historia sobre tecnología. Es una llamada a la acción, un recordatorio de que el futuro aún no está escrito y de que tenemos la capacidad y la responsabilidad de darle forma en beneficio de la humanidad.
El libro ya se encuentra disponible como audiolibro y está ya saliendo publicado por Amazon